viernes, 13 de febrero de 2015

La salida está en la ciudadanía


Evitemos buscar la salida por los rincones, la salida está en el pueblo.  Sin duda alguna debemos comprender que la solución de nuestros problemas está en nuestras propias manos, se encuentra en el compromiso que asumamos para con la nación y el porvenir de ésta.

La crisis que estamos viviendo en el país es como una tarántula con muchas patas las cuales forman parte de una máquina venenosa. La situación política, económica y social en la cual nos sumergió la inexperiencia, la improvisación y el desdén oficial está llevando a la república hacia un colapso histórico.

De aquí que es vital la acción individual y colectiva de cada uno de los venezolanos en aras de la reconstrucción nacional. No podemos quedarnos viéndonos las caras, tenemos el deber moral de dar los pasos necesarios para alcanzar los objetivos de la refundación democrática del país.

Es nuestra responsabilidad, nuestro deber, aportar la visión de país que poseemos, debemos contribuir con nuestra óptica en la formulación de soluciones concretas a la problemática nacional que nos afecta a todos.

Pasemos definitivamente de la pasividad conformista a la acción decidida. Hoy por hoy tenemos en el Congreso Ciudadano una plataforma ideal, una herramienta que nos permita certeramente la organización ciudadana en aras de la discusión y articulación de esfuerzos para alcanzar las metas necesarias para la Venezuela nueva y democrática.

Siempre he creído y defendido que la ciudadanía organizada es el arma más poderosa de todas para lograr los cambios sociales, económicos y políticos que hacen falta para orientar las acciones del Estado y mejorar, con el cambio de sistema de gobierno, el nivel de vida de todos los venezolanos.

Aquel paternalismo que nos llevó a la quiebra de la voluntad social de nuestro país tiene que ser o mejor debe ser superado de una vez por todas, para así darle paso a un real, sincero y efectivo protagonismo de los ciudadanos venezolanos.

Podemos usar refranes para recrear más el tema: “El que tiene buena voz no manda a cantar a otro” o “No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”. Hagamos el cambio.

La salida a la crisis nacional generada por el madurismo está en el ciudadano de a pie, ese que tiene que madrugar o dormir en las afueras de los centros de expendio de alimentos, está en la ama de casa que tiene que hacer milagros para adquirir los alimentos de su familia.

La salida está en el trabajador que no le alcanza el sueldo, está en el estudiante que ve su futuro peligrando y cada vez más difícil, está en el emprendedor que no puede realizar sus sueños de progreso por las condiciones de inestabilidad que vive Venezuela.

Confiemos en el pueblo. A través de las asambleas de ciudadanos hemos visto como el venezolano quiere cambio y está dispuesto a ser generador de la transformación.

María Corina Machado, Leopoldo López y Antonio Ledezma han entendido que la vía, que la salida, está en oír, en interactuar, en colocar al ciudadano en el timón de la renovación del país, lo cual ha generado el pánico en Miraflores y entre los defensores del autoritarismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario